Nos hacen llegar a la redacción de AlternativaTlx fotos y video donde explican que ciudadanos captaron a trabajadores del ayuntamiento cargando y guardando despensas en las instalaciones administrativas del actual ayuntamiento panista ubicadas en el Boulevard Emilio Sánchez Piedras, todo se hace en pleno día, cuando se supone debería estar laborando, por lo que se prevé haya un posible delito electoral de coacción o condicionamiento electoral a los trabajadores.
La denuncia afirma que dichas despensas son por instrucción directa del ex alcalde Julio César Hernández Mejía, aspirante a la diputación federal por el Distrito federal número uno, en contubernio con el actual alcalde Carlos Hernández Castillo, para favorecer electoralmente a los candidatos de la Coalición Unidos por Tlaxcala y en especial a los de Acción Nacional, Pablo Badillo Sánchez y Alberto Palestina, quienes aspiran a la alcaldía de esa demarcación y a la diputación local por el Distrito 4 de la entidad.
Este “acarreo de despensas”, afirma el correo, no es la primera vez que ocurre, ya que “en diversas ocasiones se ha visto a los trabajadores, así como a policías resguardando el proceso de acarreo de despensas y a las mismas camionetas que son cargadas con estas bolsas que contienen productos de la canasta básica, las cuales se supone serán repartidas entre los ciudadanos, con el claro interés de enrarecer el proceso electoral y para solicitarles el voto a favor de los candidatos de la alianza Unidos por Tlaxcala, en especial para los emanados del Partido Acción Nacional”, dice textualmente el correo.
Y es que no es para menos, ya que la ciudadanía se siente insultada por estos personajes que tienen secuestrado el ayuntamiento solo para servirse a sus intereses políticos y económicos, en lamentable situación se encuentra Apizaco, y sobre todo en el tema de seguridad pública que no tiene un alto, y donde seguramente hay corrupción hasta por debajo del tapete.
Hoy el actual alcalde es un títere de Julio Cesar, porque quiere tener más a costa de los ciudadanos, quiere tener más a costa del erario público y sobretodo quiere mantener a la ciudadanía de Apizaco hundida en la miseria y que le sigan pagando agua potable, parquímetros, predial y toda clase de impuestos para hincharse a su gusto, por lo que ahora hasta los trabajadores del mismo ayuntamiento hacen el trabajo sucio de Julio Cesar, posiblemente por amenazas o por seguir la instrucción del actual alcalde.
