Ser o no ser, esa es la cuestión. ¿Qué es más noble para el alma sufrir los golpes y las flechas de la injusta fortuna o tomar las armas contra un mar de adversidades y oponiéndose a ella, encontrar el fin? Morir, dormir… Ser o No Ser–Hamlet–Shakespeare–Monólogo.
Conocida como el monólogo con la calavera. En realidad, Hamlet no hablaba para sí mismo, ni lo hacía con su padre asesinado. En este acto no lleva la calavera de su amigo de la infancia (el bufón), sino cuando regresa y se entera de su muerte y va al cementerio. Hamlet sabe que lo escuchan detrás del cortinado (Polonio, que cree que el príncipe enloqueció – y es al contrario-) habla para sí, y para los otros. Con gran perturbación en su espíritu.
Así se debe de sentir en estos momentos el solemne, grande y pomposo Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE), no solo por hacer ondear la bandera de la democracia, sino porque ellos, y solo ellos tienen la razón.
Los personajes principales de la gran obra electoral argumentan cansancio por estar en agotadoras sesiones, trabajadores que no ven sus horas extras renuncian y dejan al vapor los trabajos, no hay comida, no hay descanso; -Pobres de aquellos que se encuentren en la batalla como árbitros institucionales, pobres de aquellos que tienen la consigna de hacer valer y velar por la democracia de nuestro estado.
La presidenta del organismo, Elizabeth Piedras Martínez, tiene es sus manos la calavera de esa democracia, se le escurre, se deshace, se consume, los golpes caen uno tras otro y no se puede levantar. -Su alma penará como el del príncipe Hamlet, sabe que la ven y escuchan, pero no concreta y no actúa.
12 mil 557 candidat@s a presidencias municipales. Trabajo incansable que sin duda dejará remanentes en su currículo ahora ya manchado, trata de establecer orden. -Orden que no concreta, orden que ni siquiera al interior de su Instituto puede definir, su alma penará y sin saberlo ahora, ya está marcando el posible futuro de las elecciones…. ¿INCOMPETENTE?
Su saber y experiencia no la dotaron para estas situaciones, candidatos agradecen por empezar al instante sus campañas. Candidatos molestos denotan inequidad en el proceso por no dotar del simple documento que los avale.
¿Iniciar o no iniciar campaña?, esa es la cuestión. ¿Qué es más noble para el alma sufrir los golpes arbitrarios y las flechas de la injusta democracia, o tomar las armas y manifestarse contra un mar de adversidades institucionales y oponiéndose a ella, encontrar el fin? Morir, dormir… eso es lo que se pregunta la presidenta en estos momentos.
Días y noches imparables de trabajo, días y noches de lidiar con los consejeros, días y noches de no saber qué hacer. Pobre alma perdida, pobre ser “intachable”, su pena la agobia, su pena tras de sí, es piedra democrática.
Ahí a lo lejos de visualiza la barcaza del Instituto Nacional Electoral (INE), tal y como en la mitología, salvamento de almas. Caronte, el barquero de Hades, se puede encargar de guiar su camino de sombras errantes en cuerpo y alma. Elizabeth está difunta, necesita pasar la prueba democrática, tal y como lo hacen las almas perdidas y confundidas para ir de un extremo a otro, del río Aqueronte.
¡No tengo un solo óbolo!, ¿qué hago? -Le dice al INE- y responde, ¡vagar cien años con tu pena!
Cien años por aquel río democrático, por aquel Aqueronte sin descanso, quedará plasmado en su alma, y sufrirá por no saber controlar, por no trabajar en lo importante, por no hacer lo correcto, por no hacer democracia para todos, por hacer preferencias, por ser inequitativos, por no pagar bien a sus trabajadores, por tener ambiciones antes de lo primordial, por incoherente, por absurdos, por no saber qué hacer.
Pobre alma perdida, ahora solo esperar a que Caronte (INE) se apiade y la portee sin cobrarle. Eso sí, con su calavera deshecha y con la pena en el hombro que nunca podrá quitarse.
Soy @AlexNavaMx comenten en Twitter. Hasta la próxima.
