
Hoy no está nada fácil ser mandatario, si bien hay que esperar la resolución del Tribunal Federal Electoral la resolución de las elecciones del 5 de junio pasado, hoy Marco Antonio Mena es gobernador electo; y a estas alturas del partido, las cosas no están muy bien que digamos, más bien están color de hormiga, y no solo porque a nivel nacional con los incrementos y el hastío de impuestos y pobreza que nos envuelve.
El estado no está muy bien que digamos y será todo un reto para Marco Mena establecer nuevas rutas para sacar adelante a Tlaxcala y a su población.
Mientras a seguir practicando y cuando confirme el TRIFE su triunfo. A pornerse a trabajar en su Plan Estatal de Gobierno.