
El tráfico de personas durante cientos de años ha estado presente en todo el mundo, sin embargo México por su naturaleza geográfica, es un paso de cientos de inmigrantes para llegar al “sueño americano”, con ello, para los naturalizados mexicanos, hay más posibilidades de atravesar el territorio sin exponerse a tantos peligros, por lo que suelen aprovechar los cárteles de droga o los tratantes de blancas para el tráfico sexual a la unión americana.
Desde el año 2004, se conoció el primer caso de mexicanos detenidos por el gobierno de los Estados Unidos por el delito de trata de mujeres con fines de explotación sexual, y es el municipio de Tenancingo Tlaxcala el que ha practicado esta forma delictiva por generaciones, le dicen “lugar de padrotes” y núcleo del tráfico de mujeres y niñas para darles un final sexual en la capital del país o en otros estados mexicanos, sin embargo estas aberraciones han traspasado la frontera norte para hacer más dinero por medio del tráfico sexual en la Unión Americana.
La Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), ha documentado los casos de 225 mil víctimas de la trata entre 2003 y 2016 e informó, que casi tres cuartas partes de esas víctimas son con fines de explotación sexual por ser muy lucrativa.
“La trata de personas es uno de los negocios ilícitos más lucrativos en Europa, donde los grupos criminales obtienen unos beneficios de 3 mil millones de dólares al año, siendo éste un negocio considerable que se abastece de la población mundial más marginalizada.”, (UNODC, 2022)